jueves, 23 de enero de 2014

Wallyses

El Sol hace brillar la nieve deslumbrándome, desde lo alto de la colina puedo ver a toda la gente esquiando, está el típico patoso que se cae todo el rato y recoge la nieve, el que se come las ramas de los árboles, y el que baja más rápido que un bólido. A un lado el telesilla sube suavemente trayendo las risas de los que ya se han tirado, y de los que están a punto de tirarse.
Hace un día excelente para ir a la montaña. Me preparo, cojo aire, y me impulso hacia abajo.
-¡Weeeeee! ¡Oh no! Se me ha caído el gorro mientras bajaba.
Giro la cabeza y trato de ver donde ha caído.
-¡Está aquí! - Grita alguien.
Y las luces se apagan.

¿Dónde estoy? ¡Pero si es una playa!
Dejo mi bastón junto a la toalla y trato de alcanzar el agua.
¡Buf! Esto está lleno de gente, no hay quien camine por aquí.
-¡Lo encontré!- vuelve a gritar la voz.
Otra vez a oscuras ¡Que rápido ha sido esta vez, cada vez más rápido!

Ahora estoy en un castillo ¡Y lo están asediando!
-¡Cuidado! – alguien me advierte y una roca vuela sobre mi cabeza y cae en el patio de armas.
El ariete golpea la puerta, los soldados corren de un lado para otro, todo es un caos, así es imposible encontrar a nadie.
-¡Es ese de allí! – dice la niña-
-¡Oh no! Otra vez no. Y todo se queda a oscuras.
¿Y ahora que toca? La molesta voz misteriosa cierra el libro.

Pues ahora toca esperar a que nos vuelvan a abrir.

Personajes.

La tarea de hoy es la de crear un personaje. Para ello debemos elegir tres palabras que inspiren el carácter del mismo, dibujar sus rasgos físicos claves y ponerle nombre. Y desde ahí: a escribir el personaje heredado!

Besos de tinta.

martes, 21 de enero de 2014

Ella.

Ella era rica, él pobre.
Ella había nacido llena de energía y felicidad, él por el contrario no consiguió alcanzar sus metas.
Ella le enseñó a creer, a soñar, él la apartó de su vida.
Eran tan diferentes, polos opuestos.
Pero ambos coincidían en algo, ambos se dejaban llevar por el amor.
Ella era bajita, cabellos oscuros y ojos azules intensos.
Él era alto, con una cresta de callejero y pendientes por todas partes. Ojos verdes oscuro, que mostraban una infancia que nunca tuvo pero nunca podría olvidar.
Las peleas se acumulaban, los insultos aumentaban.
Es difícil amar a alguien que puede llegar a hacerte sentir como si no valieses nada, pero nunca puedes llegar a odiarle por completo.
Todos alguna vez conocemos un polo opuesto a nosotros. Y siempre dejan huella en nuestro largo desierto de pensamientos.
Duele saber la verdad a veces, pero no puedes camuflarte entre una red de mentiras. Algunas peores que otras.
Ella le dijo ``te quiero´´, él la dejo ir. Ya que pensaba que nunca podría sentirse bien al lado de una persona tan diferente a él. Tan viva. Él sabría que se arrepentiría, pero, también que sería demasiado tarde cuando se diese cuenta.
Mi padre me dijo una vez, ``no todo lo que brilla es oro´´. y yo le contesté: ``no todo el oro brilla a primera vista´´

-Claudia

jueves, 16 de enero de 2014

Taller virtual: Opuestos


El Taller virtual de esta semana se centra en los opuestos: oscuridad y luz. Y su confluencia: el fuego, el ardor, la combustión. La tarea se centra en escoger una (o dos, o tres) de las imágenes e inspirarnos en ellas para escribir un relato que hay que subir al blog.








¡Ánimo!
Besos de tinta.

jueves, 9 de enero de 2014

Propósitos del pasado.


-¡Esta es la última caja! -Grite desde la ventana del balcón, sujetándola entre mis brazos. Comencé a andar con ella hasta llegar a la puerta. Sin embargo, justo antes de llegar a tocar el pomo, di un traspiés con la mesilla y ambos caímos al suelo.
La caja cayó al suelo y se abrió dejando salir un montón de cartas y fotos mías. La mesilla se rompió y por suerte yo solo me llevé un gran golpe contra el suelo, aunque notaba algo de sangre en mi codo.
Me acerqué a la caja y comencé a meterlo todo rápidamente hasta que encontré una foto mía con una vieja amiga mía de la infancia. Quedé ciertamente asombrada al ver que la recordaba tal y como estaba aquel día, que íbamos juntas en bicicleta por el parque. Recuerdo su largo y castaño pelo y sus converse que tanto me gustaban. Seguí observando la foto mientras intentaba buscar otra.
La siguiente que encontré estaba con otro de mis amigos de la infancia, la recuerdo como si fuese ayer. Recuerdo sus redondas gafas y su pelo tan oscuro. Recuerdo que aquel día estábamos comiendo palomitas en la parada del autobús hablando del cole y haciéndonos fotos con el móvil. Detrás de cada foto encontré escritos míos, eran deseos y propósitos para cada año. La mayoría eran simplemente vivir más recuerdos como aquellos con mis amigos, y otros más complejos como viajar por todo el mundo o convertirme en estrella del pop.
Lo divertido de estos deseos y propósitos no era que muchos no los halla podido cumplir, sino la imaginación y positividad con la que imaginaba una fantasía en mi cabeza.
Me di cuenta de que deseamos cosas que pensamos que solo las podemos cumplir al crecer y de tanto esperar a hacerlo, las acabamos olvidando. y acabamos deseando otras cosas mas simples que pensamos que son más fáciles de cumplir.
Al meter todas las fotos, cartas y dibujos de nuevo en la caja, la levanté y de ella cayó una última foto. En esta salíamos mi madre y yo, estábamos sonriendo y ella me abrazaba. Al darle la vuelta vi un escrito aunque no era mi letra, sino la suya.
decía así: ``si alguien te dice, piensa antes de actuar, no lo hagas. Si piensas siempre todos, nunca acabas actuando. Te quiere, mamá´´

-Claudia

Propósitos de año nuevo. Solo un deseo.

Cierra los ojos, pide un deseo y sopla con fuerza. Pero la llama eterna no se puede apagar. El fuego siempre quemará mi corazón consumiéndolo sin terminar por desaparecer, esperando su regreso.

La noche rodea todo, miro al cielo buscando esperanza, y una estrella empieza a moverse. Aprieto los ojos y pienso: quiero volver a verla. Al abrirlos estoy en el aeropuerto otra vez. El vuelo con destino a la Luna está a punto de partir, anuncia una voz aburrida.
No se me volverá a escapar, y mis pies resuenan por todo el pasillo. Veo a lo lejos la puerta cerrarse, empiezo a oír el motor, pero aun así espoleo mis piernas; tratando de cambiar lo imposible, tratando de alcanzar lo que ya se ha ido, tratando de escuchar su corazón una vez más.

Miro al cielo nocturno pero las estrellas siguen en su sitio, distantes en el negro vacío, envueltas en el más gélido frío que ni la llama más cálida puede mantenerse encendida y acaba muriendo sin necesitar ni un soplido.

Si cierro los ojos aún puedo recordarlos, blandos como la almohada, escondidos bajo las sábanas atacándome en la oscuridad. Pero el calor de sus labios se ha derretido como un cubito de hielo en la repisa de la chimenea. Sus manos suaves bajo el grifo de la pila, frotando el jabón, y ese olor que desprendían como cuando separas los pétalos de una flor y se escapa una suave fragancia.
¿Que nos queda? Tan solo el vacío que nos separa sin un puente que poder cruzar.

Suenan las campanadas ¡Feliz año! ¿Has pensado ya tus propósitos?
-Tan solo quiero ser feliz y disfrutar junto a ella.

martes, 7 de enero de 2014

Propósitos de año nuevo.

Todos los años comienza igual, con una lista de propósitos de año nuevo. Una lista de deseos y sueños utópicos la mayor parte de ellos que quedan incumplidos. Así celebraremos el 2014 en el Taller, escribiendo sobre estos platonismos anuales.

¡FELIZ AÑO NUEVO!
Besos de tinta.