martes, 21 de enero de 2014

Ella.

Ella era rica, él pobre.
Ella había nacido llena de energía y felicidad, él por el contrario no consiguió alcanzar sus metas.
Ella le enseñó a creer, a soñar, él la apartó de su vida.
Eran tan diferentes, polos opuestos.
Pero ambos coincidían en algo, ambos se dejaban llevar por el amor.
Ella era bajita, cabellos oscuros y ojos azules intensos.
Él era alto, con una cresta de callejero y pendientes por todas partes. Ojos verdes oscuro, que mostraban una infancia que nunca tuvo pero nunca podría olvidar.
Las peleas se acumulaban, los insultos aumentaban.
Es difícil amar a alguien que puede llegar a hacerte sentir como si no valieses nada, pero nunca puedes llegar a odiarle por completo.
Todos alguna vez conocemos un polo opuesto a nosotros. Y siempre dejan huella en nuestro largo desierto de pensamientos.
Duele saber la verdad a veces, pero no puedes camuflarte entre una red de mentiras. Algunas peores que otras.
Ella le dijo ``te quiero´´, él la dejo ir. Ya que pensaba que nunca podría sentirse bien al lado de una persona tan diferente a él. Tan viva. Él sabría que se arrepentiría, pero, también que sería demasiado tarde cuando se diese cuenta.
Mi padre me dijo una vez, ``no todo lo que brilla es oro´´. y yo le contesté: ``no todo el oro brilla a primera vista´´

-Claudia

2 comentarios:

Odiseo dijo...

Como alguien dijo una vez lo bueno biene en pequeñas dosis, o no; pero aunque sea un relato corto me gusta, sobre todo los contrastes, los opuestos, le doy a LIKE :)

C.S dijo...

Me ha gustado MUCHO Claudia. Me gusta su sonoridad y la fuerza de las frases cortas. Enhorabuena!