lunes, 18 de abril de 2016

Habitación de Hotel - Edward Hopper (Museo Thyssen-Bornemisza)



Las lágrimas caían sobre la carta, llevándose consigo aquel último suspiro.
Habitación de hotel, Edward Hopper La habitación estaba vacía, pero apenas podía respirar sin sentir sus propios sollozos.
Era como si hasta su propia fe abandonara su cuerpo, arrancando mordisco a mordisco pequeños pedazos de su oxidado corazón.
Agarró bruscamente la carta entre sus manos y la arrugó hasta verla convertida en una bola. La lanzó con todas sus fuerzas pero apenas logró tirarla lejos de ella. ¿Es así como funciona? Pones tanto empeño en las cosas que amas, y solo logras ver tus esfuerzos convertidos en tristes recuerdos.
Se ha ido, y no volverá.

-Claudia

2 comentarios:

C.S dijo...

Qué bonito Claudia! y qué triste! Me encanta la resolución final, con una pregunta y una reflexión melancólica, aunque no menos cierta. Y lo bien que relacionas el cuadro con el texto, pero creando toda una historia de fondo, esa carta..., que d un nuevo sentido a todo. Un texto precioso :)

Ahora, ¡falta la poesía! ;)
Gracias por sacar tiempo para escribir, y mucho ánimo con los exámenes!!!!
Carlota.

Unknown dijo...

Precioso!!!